jueves, 6 de noviembre de 2014

El mundo huele a culo

Esta mañana al despertar, abrí la ventana como siempre y me vino de la calle un tufo importante. Por un momento pensé que como tenía las bambas con las que saqué a los perros anoche en la repisa de la ventana (ya veis... hay quienes ponen tartas... ¬¬), pues ya sabéis... pipican, oscuridad, césped hasta las rodillas... pastel en la suela. Pero no. Venía realmente de la calle. El mundo ha sacado algo del congelador que ya lleva olvidado unos cuántos días en la encimera. Es una mezcla entre putrefacción y... y... no sé... así como a mierda.


Después, durante el desayuno pusimos las noticias como siempre y entonces lo entendí. EL GLOBO TERRÁQUEO SE HA CAGAO. Dicen que la madre naturaleza es sabia y que todo lo que le hacemos después nos lo hace pagar y, sinceramente, creo que ha llegado el día. Si las guerras actuales ya no son con tanques y cañones sino guerras bacteriológicas, antes la Tierra nos mandaba erupciones de volcanes, tsunamis, terremotos... y ahora ha decidido modernizarse y defecarnos encima. Se ha soltado, ha dejado las vergüenzas a un lado, ha decidido subirse los faldones hasta el cuello y ha dicho: "de lo que se siembra, se recoge, ahí tenéis de lo vuestro".

Enciendes la tele y todo es una plasta pero de las gordas: que si éste roba, que si aquellos mercadean con mujeres para que sean esclavas sexuales, que si aquel roba, que si Ucrania mendiga gas a Rusia, que si los otros roban, que si quiero votar tiene que ser por mis cojones, que si no quiero votar me lo tengo que comer con papas, que la Pantoja, que 80.000 parados más... Pero cómo no se va a cagar el mundo? Si yo que tengo problemas de estreñimiento me voy por las patas cada vez que veo las noticias.

La Tierra tiene un grave problema... y es que ya no se aguanta. Antes tenía un apretón y uy uy uy uy pero llegaba al baño (que está al salir de la estratosfera a mano derecha), ahora no! Siento ser yo quien os lo diga, pero se nos va... no llega. Tiene problemas de incontinencia intestinal... Yo creo que deberíamos hacer como cuando hay un problema en la familia, que coges el teléfono y dices: "Pepe, a ver si quedamos pa comer que la abuela se nos caga y tenemos que buscar una solución". Pues igual no, tenemos que quedar antes, porque aquí la abuela tiene una descomposición que un día le pega fuerte y nos deja a todos para vestir santos.

Mira... a mí esto no me mola ni un pelo. Si ya olía así esta mañana, ni te cuento de aquí 3 años. Claro que esto no ha venido de repente, que todo tiene su evolución, es como cuando tienes un hijo, empiezas con un "mira el nene que sa echo caca" y a los dos años se ha convertido en "¿pero qué le das de comer a este niño?". En el caso del niño vas cambiando de talla de pañal hasta que llega el momento orinal, pero en este caso, cuéntame tú, eh? Porque el aroma de hoy invitaba a llamar al banco para ver si te financiaban un billete sólo de ida al espacio exterior. Yo por si acaso no queréis que nos juntemos y hablemos un día sobre ello, ya he llamado a un amigo que lleva un par de años en Venus, por eso de que hay más oportunidades fuera que aquí y que la cosa está muy mala, y que me voy que allí tengo un primo que era paleta en los mejores tiempos de la construcción y ahora se está forrando poniendo máquinas de vending en el monte y no sé qué rollos... Yo por mi parte ya me pongo a buscar soluciones, pero bueno, a los que no pensáis hacer nada os queda el consuelo de que igual tampoco es tan malo eso de que el mundo huela a culo... mis perras se pasan el día oliéndoselo la una a la otra y parece que disfrutan.

2 comentarios:

  1. pues qué suerte las perras que pueden elegir a quién se lo huelen! nosotros nos comemos to la peste del sistema...
    buaaaaaagggghhhh!

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  2. pero tranquila que ahora viene Navidad y seremos todos felices de golpe!! :))

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